sábado, 21 de julio de 2007

Noche

Una noche planeada con semanas de anticipación. Un llamado inesperado. Un punto de encuentro. Un punto de desencuentro. Y al final el mismo punto que termina uniéndonos siempre.
Hay personas que valen mucho y te pueden generar sentimientos inesperados que te hacen sentir que es hermoso contar con alguien y que alguien cuente con vos. Dos historias siempre se encuentran el día que sea necesario.

1 comentario:

La niña santa dijo...

Qué bueno que ni nos saludamos para el día del amigo, eso significa que no nos hace falta recordar que somos lo que somos la una para la otra.
De carne somos!