sábado, 19 de julio de 2008

Amigos



Hay pocas cosas que asusten más al ser humano que la soledad. Todo el tiempo está buscando la manera de pertenecer a alguien. Ya sea algún lugar, grupo, persona, raza o equipo de fútbol. La pertenencia (que no es la mismo que la propiedad) se ancla en lo más profundo de las relaciones humanas articulándolas con las sensaciones. Sentir que somos parte de la vida de alguien: Así se configura nuestra propia vida.
Coloquémonos en la cultura occidental para hablar de este tema. La complicada y codiciosa vida de occidente se caracteriza por la dependencia (hasta económica) de las relaciones (carnales en todo sentido). El hombre busca a su media naranja todo el tiempo. Se enamora y se supone que con esa persona va a pasar, por lo menos, un período largo de su vida. Y si se asienta (settle down es la palabra precisa) con una pareja, tendrá hijos, los mandará al colegio, se jubilará y será feliz. Esa es la definición de la felicidad según los manuales del American Way Of Life.
Sin embargo es interesante hacer aquí una referencia al psicoanálisis freudiano. El ser humano es incompleto por definición. No puede humanizarse si no entra al mundo simbólico (del lenguaje). Para ello pierde toda conexión con su integridad, con su placer constante. Por eso el bebé llora cuando quiere comer, llora cuando quiere cagar y llora cuando quiere dormir; sus necesidad biológicas pierden su satisfacción. Cuando "crecemos" esas necesidades se van complejizando y lloramos por algo tan abstracto como el "no ser amados", no ser correspondidos. Según una canción de Nat King Cole, en este mundo "lo más grandioso que podemos aprender, es a amar y ser amados correspondidamente" (de nuevo, más preciso en su idioma original "to love and be loved in return"). Entonces, salimos en la búsqueda del amor de una pareja, que créanme, llega cuando menos la buscamos... ¿por qué? Porque no es esa la verdadera fuente del amor. El amor es otra cosa; ni estar enamorado, ni tener hijos, ni estar en pareja ¿Cuántos gays están en pareja con un sexo opuesto? ¿Cuántos hombres y mujeres traen niños a este vapuleado y enfermo planeta Tierra? Claro, porque el amor es otra cosa. Y la relación más humana y amorosa que funda todo tipo de extensión del amor originario es la amistad. Los amigos son la fuente de toda confianza, no incondicionalidad (eso en el mundo de las relaciones humanas a elección -excepto los lazos de sangre- no existe). Cuando uno se enamora de alguien, lentamente va creando una relación de amistad, no de amigos pero sí de amistad. De confianza, de compatibilidad en los puntos más incompatibles. Uno hasta puede enamorarse de un amigo en el sentido de "estar embelezado" por su forma de ser. Por su compañía. No por eso quiere casarse o tener hijos con éste.
Los amigos nos mantienen en la tierra. Tres de mis series favoritas de todos los tiempos marcan esto constantemente. Las tres tienen a Nueva York como locación principal ¿Será porque es una ciudad tan cosmopolita que hasta genera los vínculos más extraños en un contexto tan capitalista de enfriamiento de los lazos afectivos? Estas series son: Friends, Felicity y Sex & The City. Esta última en unos de sus capítulos introduce un concepto que es clave en todo el desarrollo de la historia: red de contención. Los seres humanos somos seres impulsivos. Racionales, sí, pero no por eso no impulsivos. Una palabra más feliz es: relacionales. A veces hacemos las cosas más arriesgadas por el hecho de tener lo que queremos y no lo que necesitamos. No está mal arriesgarse. Lo peor que se puede hacer es decirle a alguien qué a hacer o no (con excepciones, como todo) ¿Cuál es la clave de salir de esta situación más fuertes, aunque no por eso, ilesos? La red de contención. Estas tres series que nombré marcan, en su género y estilo, este eje como el dispositivo inicial de sus historias. Los amigos, la amistad, y de ahí que sea lo que se quiera. En fin, son la línea temporal de la vida. De las fantasías con las que encuadramos nuestra visión de nuestros trayectos. Algunas vez, la protagonista de Sex &..., Carrie Bradshaw, decía algo así como (no recuerdo textualmente): A la vida la llenamos de fantasías, y uno siempre quiere cumplirlas. Para eso no hay mejor que tener verdaderas amistades para soportar la realidad.

A todos los que se sientan identificados con esto: Feliz día del amigo, hoy para siempre.

5 comentarios:

La niña santa dijo...

Abismo... Illya Kuryaky and the Valderramas

Me estoy llevando el río
debo saciar la sed de mi adivino
estoy corriendo mucho
un pez me grita y yo nunca lo escucho
y desaparecer es lo que me aconsejan
huir de ti, salirme de tu senda
pero tomé tu piel, quedé imantado a eso
como los bosques imantan el silencio

Quién nos guía hacia el abismo
sabe que quiero sabe que busco el abismo

El mar lo siento lejos
debo nadar hasta tus sueños
desde la fantasía vos me dirás
lo fugaz que es la vida
y si quieren juzgarte
saca afuera tu alma
deja que el sol inserte algo de calma
quebrar lo inquebrantable
y ver un mundo aparte
es lo que hace que al fin yo pueda amarte

Quién nos guía hacia el abismo sabe que
quiero sabe que busco el abismo

FELIZ DIA AMIGA!

Mer Antoinette dijo...

This used to be my playground. This used to be my chilhood dream. This used to be the place I run to. Whenever I was in need. All our friends. Why did it have to end? And why do they always say?
Madonna - This Used To Be My Playground.

Mer Antoinette dijo...

Me faltó el final de la cita del tema de Madonna:
Retomo: And why do they always say: Don`t look back?
Perfecta para lo que siento en este período.

Laura dijo...

No queda mas para agregar, es textualmente lo que siento mas aún a la distancia. Enhorabuena por el blog!

Mer Antoinette dijo...

Gracias Laura por comentarme... siempre podes estar mas cerca.