lunes, 12 de enero de 2009

El amor después del amor



La carrera de Madonna presenta altos y bajos como la mayoría de la trayectoria de los artistas. Los altos comos los bajos, no pueden ser caracterizados como simples hechos del azar o de la poca inspiración de un artista. Esa poca inspiración puede tener que ver con la obligación de sacar un disco por lo que dice el contrato con las voraces discográficas. Pero eso no es condición sine qua non de mala calidad del producto ¿Acaso no puede ser que por más obligación que se le imponga al artista, azarosamente, o por una cuestión de talento o astucia, ese trabajo sea supremo? Como bien dije, en este mundo, el éxito de un artista o de sus logros en las distintas esferas que abarca el arte a veces pasa por el talento, a veces por las influencias, a veces por la (des)inspiración y a veces, muchas, por la astucia.
Madonna es la combinación perfecta de todas estas situaciones, en donde reina, sobre todas, la astucia.
Pero hay un disco de esta diva en donde la inspiración se apoderó de sus cualidades realizando, así, el disco que según revistas como la Rolling Stones, es uno de los mejores discos de la historia de la música popular. Y hasta el año 1998, en este ranking que hizo aquella revista, era el único disco de una artista femenina que integraba la lista. Ese álbum, es el catártico y personalísimo Like a Prayer.
El disco no sólo es reconocido por su música, sino por el diseño de sus tapas, las fotografías, la nueva faceta de Madonna en su moda con una tendencia más grunge y sobre todas las cosas, muy mística y muy polémica. Lo promocionó realizando su primer tour que presentaba un espectáculo de estadio a grandes escalas, con geniales escenografías y coreografías. También, es reconocido como el primer espectáculo de rock de estadio que se dividía en bloques temáticos para la representación (teatral) de las versiones de los temas. Madonna resignó un poco el cantar en vivo para priorizar un poco más la representación visual utilizando el playback o la pista para apoyar su canto en dos o tres temas de todo el show de dos horas en el que baila casi sin parar. Aunque su técnica no es la mejor (que llegaría en la época de Evita) la manera en que se esfuerza para llegar a los agudos (que los alcanza siempre) es muy auténtica y le da una personalidad a su voz que fue su sello personal hasta el momento de interpretar a la política argentina. El show integraba su papel como Breathless Mahoney en la película Dick Tracy. La banda de sonido de la película, I’m Breathless, estuvo íntegramente realizada por Madonna. Se debe destacar algo de este disco. El clásico Vogue, insignia de la carrera de la cantante durante la década de los ’90, sale de esta producción. También se destacan el divertidísimo Hanky Panky (se recomienda hacer click aquí para ver la versión del Blond Ambition), Something To Remember (con una bellísima letra) y una de las mejores baladas de Madonna: Sooner Or Later, que tan bien interpretaba en los Oscars de 1991 cuando fue nominada como mejor canción de película. Probablemente la mejor performance en vivo de Madonna.


Sooner Or Later - I'm Breathless durante los Oscars de 1991

Volviendo al disco en sí, uno no puede más que deshacerse de elogios cuando habla de esta producción. Sin dudas la separación traumática con Sean Penn generó el afloramiento de tantas emociones en Madonna, valiéndole la composición de temas sobre esa ruptura, sobre la muerte de su madre, sobre el lazo con su padre y sus inclinaciones religiosas, que fueron centro de ese disco y de la polémica que desató la americana durante los años siguientes. El disco está dedicado a su madre “quien me enseñó a rezar”.

El primer tema es el homónimo del disco y, es claro, como una plegaria. Life is a mistery / everyone must stand alone / I hear you call my name / and it feels like home. Todos sabemos el escándalo provocado alrededor del video clip de esta canción: Madonna corriendo hacia una pequeña capilla, besándose con un santo, haciendo el amor con él en el altar, incendiando cruces. Arte. No era más que una devoción total hacia la religión y sin embargo la Iglesia se le puso como loca. En el Blond Ambition este tema seguía a una versión de Like a Virgin (perfecta alegoría) en la que Madonna simula (o no) una masturbación. Luego de representar la masturbación con una euforia descontrolada, las luces se apagan, la iluminan a ella y una voz en Off llama: God? (Dios?). No hay mucho más que agregar.


Madonna simula masturbarse mientras canta Like A Virgin en el Blonde Ambition Tour de 1991

El track número dos, es ni más ni menos que el clásico Express Yourself. Muy ochentas, con unos vientos interesantes. Una atmósfera de los temas más bailables de la época disco. Una letra muy lograda. Un temazo que tenía de las mejores coreografías para hacer en vivo, en este caso, en el tour, utilizaba pista. En la presentación del tema en los Video Music Awards de 1990, cantó y bailó en vivo acompañada por Niki Harris y Donna Delory, quienes le hicieron los coros y bailaron con ella durante unos 15 años (hacer click aquí). Un video que imitaba a la película Metrópolis de Fritz Lang. La voz de Madonna suena con mucha fuerza y desafío.
El tercer tema es una perla escondida de Madonna. Love Song la grabó y compuso junto a Prince, quien también produce el último tema del disco. El tema también es una alegoría a su relación con Sean Penn. Paradójicamente a lo que insinúa el título, la letra del tema aclara que esta no es una canción de amor: This is not a love song. Es una genialidad con el sello de Prince y una hermosa interpretación de Madonna.
El tema que le sigue era el relato de la relación con Sean Penn en los últimos tiempos antes del divorcio: They never laugh / not like before / she takes the key / he breaks the door / She cannot stay here anymore / he’s not in love with her anymore / the bruises the will fade away / you hit so hard with the things you say / I will not stay to watch your hate as it grows / You're not in love with someone else / You don't even love yourself / Still I wish you'd ask me not to go. El título de este tema es una ironía a lo que se supone que debe ser el matrimonio (otra cuestión que generó polémica), durar hasta que la muerte nos separe.
Promise To Try es una de las mejores interpretaciones de Madonna., probablemente por la carga emocional que tiene esta canción. Promise To Try es una catarsis sobre la muerte de su madre, cuando ella tenía 5 años, y cómo quiere recordarla de la mejor manera, cosa que tal vez le ha costado hacer: Does she hear my voice in the night when I call / Wipe away all your tears, it's gonna be all right / Don't let memory play games with your mind / She’s a faded smile / frozen in time / I’m still hanging on / but I’m doing it wrong. Toda la letra vale la pena (haga click aquí). La canta con un nudo en la garganta durante todo el desarrollo del tema, cosa que le da la unicidad de una verdadera obra de arte.
Cherish es una de las canciones con más alegría que jamás haya grabado. También hace referencia a su separación con Sean Penn pero del lado positivo: So tired of de broken heart and losing at this game / befote I star this dance / I take a chance in telling you / I want more than just romance / Cherish the thought of always having you here by my side / cherish the joy / you keep bringing into my life / cherish the strength you got the power to make me feel good / I perish the thought of ever leaving / I never would. El video lo dirigió Herb Ritts, el fotógrafo de True Blue, quien no se sentía capacitado para hacerlo. Aún así, sacó una de las más hermosas caras de Madonna: muy natural, en la playa, sin maquillaje, rodeada de sirenos y sirenitos.
Dear Jessie es una hermosa canción para niños escrita por el co - productor de este disco, Patrick Leonard, para su hija recién nacida Jessie. Madonna quiso incluirla en su disco ya que contemplaba una etapa de la vida familiar, tan citada en esta obra. Es hermosa de escuchar y en el video Madonna aparece como un hada animada que hace magia sobre Jessie. Los violines que son la base de este tema, van mutando hasta transformarse en la introducción del siguiente tema, mucho más oscuro, Oh, Father.
Sin dudas, otro de los más altos momentos del disco. Madonna insiste en que no es directamente a su padre a quien le canta, sino que es al vínculo con los hombres y cómo la relación con el padre es preámbulo de esto. Sin embargo, cuando uno ve el video no puede no hacer esta asociación. Una maravilla: Oh, father, if you never wanted to live that way / If you never wanted to hurt me / Why Am I running away? / You can’t hurt me now / I got a away from you / I never thought I would / You can’t make me cry / you once had the power / I never felt so good, ‘bout my self. Como ya hemos visto en el blog, tiene el mismo ambiente de confesión de Live To Tell, por eso las interpreta juntas en el Blond Ambition.
En Keep it together, por su lado, intenta exorcizar a todos los demonios que la persiguen en su historia familiar y narra la historia de su vida hasta ese momento y cómo la familia para ella fue clave. La versión en vivo en el Blond Ambition es un imperdible homenaje a Bob Fosse.


Keep It Together durante la presentación del Blond Ambition Tour

Spanish Eyes es una hermosa balada con ritmo español a lo Isla Bonita y me atrevo a decir que es mucho más hipnótica y poética que el éxito de su disco anterior. Le canta a un amor perdido a través de una plegaria con algunas frases en castellano mechadas como en aquel tema también. Por lo que insinúa el tema (no se encuentra mucha información en la web sobre él) ese hombre ha sido muerto en algo similar a una Guerra Civil: How many lives will they have to take? / how much heartahe? / how many suns will they have to burn? / spanish eyes / when wll they ever learn?
Lo último es una rareza. Art of Contrition es literalmente, una plegaria con la que comienzan algunas misas católicas. Sólo que está producida por Madonna y Prince, contiene voces gospel reproducidas al revés, al igual que la guitarra de Prince, que es la que aparece al comienzo de Like a Prayer y Madonna la hace cantada.

Por todo esto, hago hincapié en declarar, que así como a Fito Páez el amor le supuso su más grande inspiración y hacer su único excelente disco, El amor después del amor, que supera cualquier disco que se haya hecho en los últimos 15 años en este país, a Madonna el amor, le supuso lo mismo, pero desde otro lugar. Han dicho que este disco ha sido lo más cercano al arte que ha estado el pop. No se puede estar más de acuerdo. Porque todas las experiencias propias que Madonna había vivido en los años que precedieron a este disco fueron la gestación de sus emociones más oscuras y reveladoras a la vez de cuál era su potencial. A eso le sumó su astucia. Así, comenzó a gestarse lo que hoy conocemos como Madonna. Este fue el período más influyente de la cantante porque fue en donde su talento y dotes artísticos se fusionaron con el condimento de empresaria necesario.

2 comentarios:

La niña santa dijo...

Qué lindo es recordar videos como Cherish o Express Yourself, donde se la veía a Madonna tan viva. Si bien nunca dejó de mostrarse así, últimamente su propuesta artística es más robótica, menos espontánea... Es un poco también el estado actual de la música, no?

Mer Antoinette dijo...

Comparto totalmente. No sólo lo de la robotización de la música sino que la forma de consumir la música tb hace que cualquier zanguango escuche a cualquiera y vaya a el recital de cualquiera. O sea, realmente, seamo ssinceros. Más allá de la polémica por las reventas; cuando MAdo vino en 1993, estábamos uno a uno con el dolar y no llenó el estadio de River. Estuco repleto pero no lleno. Ahora, de pronto, estalla el estadio en 4 fechas, se agotan las entradas en una hora (aunque fue mentira). Por lo menos, en este país, MAdonna no generó más FANS que en su época de oro. Es un hecho. Pero la onda mp3 y DVD hizo que muchos conocieran algún que otro disco, o algún que otro show y fuera de curioso. No está mal... pero sí hace que hasta la música masiva pierda su rótulo de masiva y se convierta en música pasajera...